Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Con los cueritos quemados terminó un pobre paisano de oficio jardinero ayer a las 11:30 de la mañana en la supermanzana 17, pues al estar ganándose la papa del día en un cantón de esos de la ‘jais’, accidentalmente cayó en una cerca eléctrica que lo mandó derechito al hospital tras recibir una fuerte descarga.
Testigos estaban atónitos porque con esos ojitos que se han de comer los gusanos, vieron que Aroldo Ramírez Hernández, de 26 años, le estaba dando duro y tupido a las ramas de un árbol, pues esa era su chamba.
Dijeron los chismosos que el vato estaba muy cerquita de la orilla sin las medidas de seguridad adecuadas, que en una de esas se fue al vacío, tanto que sus reflejos solo alcanzaron a agarrarse de la cerca eléctrica, la cual le propinó soberana descarga, quemándole las carnitas en un santiamén.
Se escuchó un estruendo en el lugar y luego un seco golpe; cuando los dueños del cantón salieron a ver qué rayos pelaron los ‘oclayos’ y se dieron tinta de que era el trabajador que habían contratado para el servicio que estaba sobre el suelo, aún con humo en toda su humanidad.
Vecinos salieron en ‘tinga’ loca para ver qué tranza, y de volón pin pon avisaron a los ‘curitos’ de la Cruz Roja, así como a los bomberos, pa’ que llegaran a hacerle el paro al hombre, ya que tenía los cueros de los brazos con quemaduras de segundo y tercer grado.
Los rescatistas de la benemérita institución en ‘tinga’ loca brindaron los primeros auxilios a Aroldo, a quien llevaron a la clínica del IMSS de la 510 para su pronta atención médica.
