Fue su último y mortal acelerón

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Redacción/De Peso

CHETUMAL, Q. Roo.- La necropsia realizada al veterano motociclista Luciano Román Domínguez, de 87 años, reveló que perdió la vida a causa de traumatismo craneoencefálico severo, lo que indica que no llevaba puesto el casco al momento del accidente, o se le cayó cuando se le aceleró la yegua a gasolina, además de que presentó fuertes golpes en diversas partes del cuerpo.

Sus familiares le dieron el último adiós en Bacalar, luego de que el pasado sábado perdiera la vida al impactar su caballo de metales contra una barda. Debido a su avanzada edad, no resistió los golpes y las heridas, por lo que le pidió a San Pedro que le diera un ladito en su banca.

Fue a las 5:30 de la tarde, cuando doña Agrícola Román Palomeque, de 47 años, pidió ayuda a los paramédicos del Grupo de Reacción a Emergencias Médicas (GREM), debido a que encontró a su padre tirado en un área de maleza, frente a su vivienda, ubicada sobre la avenida 19 entre las calles 8 y 10.

Se supo que el occiso cabalgaba en su burra como un adolecente. Una de las hipótesis que se manejó en el lugar de los hechos fue que se le desbocó el potro de hierro y se proyectó contra la barda ubicada frente a su chante, donde acabó sin vida; su moto, una Vento Spectra roja, cencerro VFZ8S, sufrió daños en la parte frontal.

Amigos y vecinos de don Luciano le dieron el último adiós y lo recordaron como una buena persona que le gustaba mucho estar activo y era muy trabajador, sin embargo, a sus 87 años era muy riesgoso que continuara conduciendo motocicleta.

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