R. D. / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Daños materiales como para romper el cochinito fue el saldo de un aparatoso choque derivado de la imprudencia de un joven conductor que tomó la avenida Tules como pistas de carrera y perdió el control para derribar dos teléfonos públicos, así como causar daños a una toma de agua y una camioneta de ‘lux’.
Aproximadamente a las 10:30 de la noche, guardias de seguridad de la Multiplaza Cancún, ubicada en el cruce de la avenida Tules y Kabah, sintieron que el alma les abandonaba el cuerpo tras escuchar un fuerte impacto que provenía de la entrada del estacionamiento.
Al salir los guardias vieron que escapaba con la trompa destrozada una unidad de la marca Nissan, con placas del estado de Veracruz, la cual había derribado dos teléfonos provocado daños al medido de la plaza y una camioneta tipo CRV, que se encontraba en el interior del estacionamiento.
Por tal motivo le pasaron el pitazo a los tranchos que localizaron al conductor responsable con todo y unidad cuadras adelante para darle tanque, mientras que la unidad fue trasladada al corralón para que responda por la daños de su burrada.
Lenguas viperinas escupieron que el conductor manejaba como loco y al tomar la avenida Tules perdió el control para llevarse de corbata los teléfonos y hacer todo un desmoder.
