Redacción/De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Juan ‘J’.’C’, de unos 35 años aproximadamente fue enviado al otro mundo con unos buenos plomazos, pues su cuerpo quedó inerte en el interior de su auto ayer, cuando los sicarios lo interceptaron en la colonia Maracuyá para darle piso; al lugar llegaron los agentes de la ‘poliministerial’ para hacerse cargo del relajito.
Eran las 7:30 de la mañana cuando las ‘nenas’ del 911 recibieron varias llamadas en las que les dijeron que clarito escucharon balazos. El chisme de que había un vato herido por arma de fuego corrió como reguero de pólvora; el hecho movilizó al kilo de ‘polis’ hacia la zona.
Al parecer el individuo fue emboscado en un camino de terracería, el cual conecta con la colonia Maracuyá, a escasos metros de la avenida Kabah, muy cerca de un súper, donde todo no cuesta menos; trascendió que el tipo recibió al menos dos tiros certeros en la mera ‘chola’ y lo mandaron en un abrir y cerrar de ojos al más allá.
El cuerpo del ejecutado quedó del lado del conductor dentro de su nave Mitsubishi, con placas de Yucatán; el carro presentaba balazos de un arma, al parecer calibre 9 milímetros.
Juanito (nombre que llevaba en una credencial) vestía un sport de rayas negro con rojo y short negro, además de una gorra verde con blanco, también llevaba puestas unas chanclas azules.
Quienes se hicieron presentes en la escena del crimen, por si las moscas pelonas necesitaban de su ayuda, fueron los ‘curitos’, pero estos solo comentaron que el ‘compita’ ya no contaba con signos vitales.
Los agentes cerraron la zona con cinta amarilla tras la llegada de los ‘ministeriosos’; más tarde, los ‘levantamuertos’ ordenaron el traslado del cadáver al Servicio Médico Forense (Semefo).
