Víctor Hugo Lizama Morales/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Por recomendación de nuestro colega guía de turistas, Andrés Lara, dirigimos nuestra atención a un producto que está presente en diversos guisos y postres de México y en especial de la península yucateca: la canela.
El árbol de la canela, conocido como canelo, (Cinnamomumzeylanicum o Cinnamomumverum) es originario de oriente; además de Sri Lanka, también se cultiva en la India, y en otras zonas del mundo, incluyendo todo el sur de Asia.
Era un producto muy valioso, raro y costoso, un regalo que sólo se podían dar el lujo de usar los reyes.
Buenamente, la canela, aunque no es muy barata, existe en cualquier mercado, establecimientos dietéticos y tiendas de café.
El aroma característico se debe a la parte grasa de la canela por un compuesto llamada cina aldehído, el encargado de la mayoría de las propiedades de la especia, con beneficios que destacan para nuestro organismo y la salud.
Muchas veces la consumimos con el café, cosa que se le hace muy rara a los europeos, y varias golosinas llevan canela como los famosos “zapotitos”, mazapanes hechos a base de pepita de calabaza.
Otro postre que lleva esta especie es el arroz con leche. Aparte del buen sabor es importante saber que contiene antioxidantes, sustancias que protegen a nuestro cuerpo de los daños oxidativos provocados por los llamados “radicales libres”.
Según un estudio, se compararon los poderes antioxidantes de 26 especias y la canela resultó la ganadora, por encima de otros alimentos como el orégano o el ajo. Permite reducir la hinchazón en diferentes partes del cuerpo, así como también combatir las infecciones, reconstituye el tejido dañado y es un alivio para los padecimientos de artritis y gota. Por si fuera poco, reduce los niveles de colesterol “malo” y los triglicéridos.
Algunos estudios indican que aumenta la cantidad de colesterol “bueno” y que también reduce la hipertensión. Obviamente es un aliado del corazón.
La canela disminuye el azúcar en sangre y los diabéticos deben consumirla más seguido. Al expulsar los radicales libres, evita cáncer de colon, muy frecuente hoy en día. Inhibe una proteína en el cerebro que desencadena el Alzheimer, protege las neuronas y mejora la función motora en los pacientes con Parkinson. Mi correo es: [email protected]
