Una angustiada madre acudió a la base de los rescatistas del Grupo Rino, en la comunidad de Huay-Pix y alertó a los ‘ponecuritas’ de que su bendición, se había quedado pegado a una madera tras habérsele encajado un barreno en la mano derecha.
Fue a eso de las 11:00 de la mañana, cuando el menor se encontraba jugando en el patio de su vivienda, ubicada en los linderos de la población el cual se encuentra a 10 kilómetros de la capital, cuando en un descuido el pequeño colocó con fuerza la mano en un viejo pedazo de madera del cual sobresalía la punta de una pija multiusos, la cual se incrustó en su piel.
Al darse cuenta de la delicada situación la ‘mamiringa’ del niño acudió a toda prisa a la base del grupo de rescate, quienes salieron volados para el lugar, por fortuna se la pudieron extraer y en cuestión de minutos fue liberado.
Una vez que le fue extraído le aplicaron medicamentos y le dieron la recomendación a la doñita de estar más pendientes de sus chilpayates y sobre todo botar todo la madera o fierro viejo que contengan alguno tipo de metal con punta o filoso que pudiera poner en riesgo a su familia.
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