Jorge Uc / De Peso
CHETUMAL, Q. Roo.- Estando hasta las ‘manitas’ de ‘pedernal’, el ‘caón’ de Gamaliel Canul Collí estuvo a punto de provocar una desgracia al perder el control del volante de su nave y arruinarle las ‘nachas’ a un Hyundai i10 que su conductor estacionó como se debe, antes de irse a comprar la cena en un puesto ambulante en el fraccionamiento Caribe.
El relajito se registró a las 10:00 de la noche de ayer en la avenida Constituyentes del 74 entre Curacao e Islas Vírgenes, en la referida zona habitacional, hasta donde llegaron ‘tranchos’ y paramédicos de la Unidad de Respuesta a Emergencias Médicas (UREM), para valorar a un par de niños que resultaron ‘zangoloteados’ pero no fue necesario trasladarlos al hospital.
Los mitoteros chismearon que Gamaliel, quien conducía estando más que ahogado en alcohol un Ford Ikon azul latitas URE-002-C, con dirección de oriente a poniente por la calle Curacao, salió del fraccionamiento Sian Kaan II a exceso de velocidad.
Se incorporó a Constituyentes del 74 y al dar vuelta en el retorno para circular de norte a sur, perdió el control del volante, ‘banqueteó’ con la guarnición del camellón y le dio su ‘besito’ a traición a un Hyundai i10 rojo latillas UVD-252-D, que estaba bien estacionado, ya que Ramiro ‘N’, su conductor en esos momentos compraba cena en un puesto ambulante.
Del fuerte trancazo, el Ford se embarró con la pared del minisúper ‘Jym’ dañando un exhibidor y la estructura de concreto, por lo que fue detenido.
Dentro de la ‘trulla’ Gamaliel comenzó a golpearse contra un cristal, por lo que fue llevado de inmediato a certificar y posteriormente fue consignado al ‘emepé’ especializado en choques para el deslinde de responsabilidades.
