Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Luego de dar la patada inicial de la final entre los los “Toros” y los “Nevos” de Halachó, que pertenece a la Liga de Fútbol Juan Pablo II y en el que participan 40 equipos, el diputado federal Jorge Carlos Ramírez Marín buscó con que refrescarse y se topó con el puesto de “doña Nena” y su famoso “gomiboing”.
El diputado entregó balones, trofeos y otros materiales a los deportistas, disparó también los chicharrones a la raza sentada en las gradas del campo deportivo, la casa de “Los chivos”. Era el mediodía y el Sol caía a plomo, así que decidió meterle al “gomiboing” y a un “pelón pelo rico” mientras esperaba el preparado.
El “gomiboing” es parecido al granizado o raspado, es un Boing congelado que se machaca, se le pone chamoy, una banderilla de tamarindo y gomitas. Una bomba de sabor.
Pero, lo que más le llamó la atención al diputado fue la historia de Hilce Kú Tun, la chavita que ayuda a su mamá “doña Nena” (Hilda Tun Kú) a vender golosinas, frituras, bolis, panuchos y salbutes para ganarse la vida, pues quedó viuda hace 14 años, cuando Hilce apenas tenía dos años de edad.
Hilce (mezcla de Hilda y César, como se llamaba el papá) y su madre crearon el “gomiboing” para mejorar las ventas del changarro y hoy es todo un éxito en Halachó.
Pero, esta chavita, con mucho esfuerzo, estudia en el Cobay y quiere estudiar robótica o medicina forense. Su hermana Reina estudia para maestra de Preescolar en Calkiní.
“El caso de Hilce y su familia es un ejemplo de superación que tenemos por todos los rincones de Yucatán. Son las historias de vida que vale la pena apoyar y son las que motivan mi propuesta de Cero jóvenes en las calles. Desde luego que la vamos a apoyar”, afirmó Ramírez Marín, conmovido por la historia de Hilce y su familia.
