Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Nadie sabe qué ‘demoños’ pensaba Eliana Rodríguez, de 26 años, pero ayer a las 2:15 de la tarde, sobre la López Portillo dio el volantazo con su nave sin darse ‘color’ de la presencia de un motorizado, a quien se llevó de corbata.
El guamazo fue a la altura de la conocidísima Ciudad de la Alegría, donde Eliana aporreó su Nissan Versa rojo, engomado UTF-463-C, pues por hacer una mala maniobra al volante le dio su beso al caballito de acero raza Vento rojo, placa T3EU7, de Romualdo Balam Balam, de 29 años, quien cayó en el sucio asfalto y perdió hasta la alegría
Dicen las lenguas viperinas que el hombre empezó a revolcarse como tlaconete en sal sobre el pavimento y por eso tuvo que ser manoseado por paramédicos de la 911, quienes se lo llevaron hasta la clínica PlayaMed para su ‘becho’, ‘abacho’ y apapacho.
Cuando llegó el ‘trancho’ en turno, a ojo de buen cubero señaló que la fulana efectuó un cambio de carril sin la debida precaución y ¡pum! chocó.
Por la maniobra, el auto salió proyectado contra una barda del lugar y más tarde tuvo que ser remolcado para que la conductora pague todos y cada uno de los daños ocasionados.
