Redacción / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Con un plomazo, que lo mantiene con un pie en el otro mundo, fue ingresado en la sala de urgencias del Hospital General, un paisano que fue visitado por ‘tirabalas’ del crimen organizado, quienes lo interceptaron al llegar a su casa, ubicada en la avenida Niños Héroes, manzana 102, lote 23, de la supermanzana 259.
En punto de las 9:40 de anoche, las nenas del 911 recibieron por fin la llamada que esperan todos los días, el reporte de una persona lesionada por arma de fuego, por lo de inmediato desplegaron en el lugar varias patrulla de la Policía Municipal.
En el sitio, una doña les hizo señas a los ‘cuicos’ y esta vez no eran obscenas, sino para informarles que un familiar, que se encontraba adentro de su ‘chante’, tenía un plomazo en el cuerpo y necesitaba atención médica.
De inmediato los uniformados procedieron a realizar la danza de la cinta amarilla.
Posteriormente, paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar de los ‘deshechos’ para trasladar al lesionado a la sala de choque del ‘HospiGen’ en clave ‘no te nos enfríes’.
Los paramédicos dejaron al paciente en manos de los ‘matasanos’ de guardia, quienes se enfrascaron en una lucha por salvarle la vida.
En tanto, los ‘cuicos’ le hicieron como Ana Bárbara y buscaron hasta por debajo de la cama los casquillos percutidos.
El ‘pex’ fue que, al no encontrar evidencia por ningún lado, procedieron a reciclar su cinta amarilla, es decir, se retiraron del sitio, sin esperar a que llegaran los ‘sabuesos’ ministeriales ni peritos de la Fiscalía General del Estado.
