Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Susana Irán Rivero, de 37 años, viajaba en ‘tinga’ loca en su navecita ayer a las 10:00 de la mañana, cerca de la supermanzana 21, cuando de pronto ¡pum! se embarró en el auto de otro paisano.
Todo ocurrió en el cruce de las avenidas Yaxchilán y Palenque; las lenguas viperinas soltaron la sopa y aseguraron que el Chevrolet Spark gris, engomado USM-365-D, de Susana le dio con ‘tocho morocho’ al Nissan March blanco, láminas ZAW-50-39 de Yucatán, de Rosales López Díaz, de 42 años.
Como reguero de pólvora corrió el chisme del accidente y por eso se arremolinaron los agentes de Tránsito en el lugar, quienes se dieron color de que fue Susanita quien al parecer no cedió el paso a su contrario, que circulaba por el carril preferencial (Yaxchilán) y por eso lo impactó.
Dicen los chismosos que el auto blanco, de conocida empresa de cable, conducido por Rosales, salió proyectado y giró como trompo chillador en el asfalto mojado hasta subirse a la guarnición, donde detuvo su loca carrera contra un poste de madera de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La damita aceptó que quería ganarle el paso a su contrario, pero cuando torció la acción ya le había dado su llegue.
Los agentes fueron prácticos, así que mandaron a los conductores a ‘trancholandia’ para los trámites legales correspondientes.