Redacción / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- De por lo menos cinco plomazos fue enviado al otro mundo un mecánico de motos en la supermanzana 95, cuando hombres armados a bordo de dos automóviles llegaron hasta su changarro para llenarlo de plomo en el momento que estaba reparando una ‘burrita’ de metal.
Eran las 10:30 de la noche, de ayer, cuando el número de emergencias recibió el reporte de que sobre la calle 104 entre 22 y 24, frente al lote número 3, en la supermanzana 95, se encontró un hombre con plomo en el cuerpo.
En clave ‘tengo miedo’ policías municipales llegaron únicamente para acordonar la zona, mientras que paramédicos de la Cruz Roja hacían su entrada triunfal, para confirmar que el herido ya se les había adelantado en el viaje sin retorno.
Por ese motivo fueron convocados los ministeriales, quienes se encargaron de sopear a los testigos, los cuales boquearon que Samuel ‘N’ estaba trabajando cuando llegaron dos vehículos, uno compacto en color blanco y una troca azul.
De las unidades descendieron dos hombres que abrieron fuego en contra del occiso, para después escapar hacia la avenida Nichupté.
Posteriormente llegaron los ‘levantamuertos’ de Servicios Periciales, quienes se encargaron de recuperar tres casquillos percutidos para arma larga calibre .223 y tres de arma corta 9 milímetros pa’ completar el kilo de cobre y finalmente levantar el cuerpo y trasladarlo a la morgue.
