Enrique Castro/De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Como chango acabó trepado un ‘caón’ con todo y su nave en un poste de madera que derrumbó y se lo dejó caer a un carro estacionado, entre las avenidas Yaxchilán y Cobá, donde los ‘cuicos’ solo encontraron los vehículos porque el presunto emprendió la huida.
Alrededor de las 3:30 de la madrugada de ayer, un pelafustán a bordo de su Ford Ikon rojo, laminitas UVD-188-C, pisaba a fondo el ‘aceleradors’ y al llegar a la glorieta del citado cruce, frente a la supermanzana 25, su carro patinó cual bailarina sobre hielo y ¡moles!, se estrelló contra el poste de telefonía.
Del duro trancazo el ‘palo’ se arrancó de su base y aplastó un Volkswagen Gol blanco, sin matrícula, propiedad de una empresa de renta de naves, que estaba estacionado en el lugar menos indicado, pero que por suerte no había nadie en su interior.
Los testigos del laminazo en ‘tinga’ loca alertaron a los ‘tranchos’ y ‘cruzrojitos’, quienes llegaron en ‘fa’ y descubrieron que el Ford estaba abandonado y según las lenguas viperinas, el conductor andaba hasta las manitas de ‘pedernal’, por lo que dejó su carro, el cual seguramente cuando se le pase lo enfiestado, buscará como loco.
Alguien le habló al oído al perito de ‘trancho’, para ponerle el dedo a un ruletero de la ola verde, quien al parecer fue el que ayudó a huir al ‘caón’ que armó el ‘despapaye’, pero el chisme no lo pasó bien, pues no vio el número económico y mucho menos las placas.
Pa’ luego es tarde dijo el ‘tamarindo’ quien pidió al chamacón de la grúa que subiera los carros para irlos a tirar al corralón, mientras aparecían los dueños para el deslinde de responsabilidades.
