Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo .- Vecinos de la colonia El Milagro se sacaron de onda cuando les dijeron que uno de los habitantes del rumbo ya había pasado a mejor vida; al principio se creyó lo ‘pior’, hasta que más tarde las autoridades indicaron que el deceso fue por causas naturales.
El reporte entró al número de emergencias 911 cerca de las 8:00 de la mañana, el cual indicaba que el cuerpo de una persona del sexo masculino se encontraba en el interior de un jacal ubicado en la calle Grecia, a cuatro kilómetros de la avenida López Portillo.
Doña María del Carmen ‘N’, de 50 años, dijo que encontró el cuerpo de su cónyuge en una hamaca, sin mover un solo dedo, además que estaba en una posición medio rara, por lo que pidió ayuda a los cuerpos de emergencias.
Cuando los paramédicos de la Cruz Roja llegaron les tocó dar la mala noticia de que don Francisco Hernández, de 54 años, ya no contaba con signos vitales.
La ‘ñora’ mencionó que su esposo tenía varios años padeciendo diabetes e hipertensión y desde hacía tres semanas no trabajaba, así que estaba deprimido por su enfermedad ya que incluso amenazó con quitarse la vida. Anteayer por la noche fue la última vez que se le vio, y ayer por la mañana la vida se le escapó.
Cuando las autoridades llegaron, vieron que el cuerpo en efecto ya no contaba con signos, además que no se le encontraron huellas visibles de violencia, por lo que determinaron que la causa del fallecimiento pudo ser por un probable paro cardiorrespiratorio. Los familiares pidieron que se certificara el cadáver, ya que después de este trámite ellos se despedirían de su allegado dándole sepultura.
