Luis Hernández / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Plomo por doquier recibió un morro de 18 años, cuando dos pelafustanes le dejaron caer mientras estaba en el changarro de su papá, ubicado en el fraccionamiento Las Palmas; como pudieron lo subieron a un taxi y lo trasladaron al hospital.
Ayer a la 1:00 de la tarde, el encargado de un expendio de ‘chupe’ llamó al 911 para reportar que dos canijos en una ‘burrita’ metálica negra, al parecer Yamaha, le habían soltado varios plomazos a su retoño y requería el apoyo de toda la ‘liga de la justicia’.
Cuando llegaron los ‘azulejos’ ya era demasiado tarde, pues los familiares de Oswaldo Jesús ‘G’ ya lo habían trepado a un taxi y estaban camino al Hospital General, donde los doctores reportaron a la Policía Ministerial su ingreso.
Se chismeó que el morro tenía lesiones de entrada sin salida de proyectil de arma de fuego en cuello, mentón, tórax, pelvis y axila izquierda, por lo que su situación médica era reservada, ante la gravedad de sus heridas.
Los ‘matutes’ que llegaron al cruce de Palma Africana y Palma Real en la supermanzana 259, reportaron que no había casquillos percutidos en la calle, por lo que se presumió que el ataque ocurrió dentro del local de ‘agüitas locas’.