Enrique Castro / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Se dijo que había sido un levantón, luego un robo y pocas horas después de ocurrido un ‘despapaye’ en la avenida Yaxchilán con calle Piña de la supermanzana 25, salió el peine de que en realidad lo sucedido en el local denominado Mentes Creativas Tatuajes fue una tentativa de homicidio contra una persona identificada como J.C.M.
De acuerdo con la declaración del agraviado, ayer a las 4:40 de la tarde se encontraba en el interior de dicho local tatuando a dos clientas, en el área de la primera puerta, y de repente un su compañero V.M. le tocó la puerta y le dijo: “tienes una cita”.
En eso estaban cuando se dio cuenta que empujaron fuertemente la puerta y a su compañero lo aventaron al suelo; entonces pudo ver que un ‘pelabná’ de unos 20 a 30 años de edad que vestía pantalón de mezclilla y playera de color rojo, de aproximadamente 1.60 de estatura, moreno y de complexión media, le apuntaba con un arma de fuego.
Todo pasó muy rápido y “solo observé el cañón cromado del arma que hizo un sonido fuerte, como si cargara, en ese momento la puerta se cerró ya que una de las clientas la empujó lentamente; pero volvió a abrirse y me apuntaba directamente a la cara; inmediatamente esa persona volvió a cortar cartucho e intento disparar pero no lo consiguió”.
J.C.M. agregó que aprovechó ese instante para mover a su ‘clienta’ hacia un lado y él se tiró al suelo, por lo que pudo observar que no se accionó el arma y en eso escuchó que su agresor gritó “pásame la otra”.
Señaló que también pudo oír a su compañera llamarlo por su nombre, por lo que se animó a salir del área de tatuajes en compañía de sus demás compañeros y ‘volaron’ a la calle, donde observaron que la persona que lo había encañonado estaba a bordo de una motocicleta con otro ‘caón’ y se dirigían hacia la avenida Cobá.
Finalmente, J.C.M. informó que estando en la calle pudo observar que un vehículo compacto impactó a la motocicleta donde huían los aprendices de sicario, los cuales cayeron al pavimento; el que lo intentó matar corrió hacia la avenida Tulum y el otro levantó la motocicleta y se fue sin saber qué dirección tomó.
