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Entre dos ‘grandotes’ le dieron

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Ángel Antonio Estrada Solano piloteaba el taxi 0605 Nissan Tsuru, llevando a un pasajero, sobre la avenida Tulum con calle 2, donde sintieron un arrimón por parte del autobús 412 de la Ruta 5, el cual los proyectó contra el 572 de la Ruta 17. Por suerte, nadie resultó lesionado.
Ángel Antonio Estrada Solano piloteaba el taxi 0605 Nissan Tsuru, llevando a un pasajero, sobre la avenida Tulum con calle 2, donde sintieron un arrimón por parte del autobús 412 de la Ruta 5, el cual los proyectó contra el 572 de la Ruta 17. Por suerte, nadie resultó lesionado.

Enrique Castro / De Peso

CANCÚN, Q. Roo.- Casi como ‘sándwich’ y con relleno en medio dejaron a una ‘alcancía rodante del gargajo verde’ dos autobuses de transporte público, cuando circulaban sobre la avenida Tulum con calle 2, supermanzana 64, donde los ocupantes corrieron con suerte ya que solo resultaron con el ‘puerquecito’ descuadrado, ayer a la 1:30 de la madrugada.

Los hechos ocurrieron cuando Ángel Antonio Estrada Solano, de 56 apachurrados años, y su pasajero circulaban a bordo del taxi 0605 Nissan Tsuru, placas 45-65-TRV, pues en el cruce mencionado pensaron que se les iba la vida al sentir un arrimón por parte del autobús 412 de la Ruta 5, Mercedes Benz, engomado 795-201-T, de la empresa Autocar, al mando de Cirlo Perdomo Mendoza, de 27 años, quien realizó un cambio de dirección hacia la izquierda.

La maniobra del ‘autchocar’ provocó que el taxi diera un giro intempestivo hacia la izquierda y al proyectarlo se estampó en las ‘costillas’ del lado derecho del camión 572 Mercedes Benz, engomado 794-669-T, de la Ruta 17, al mando de Lorenzo Tolosa César, de 34 años, quien no tuvo chance de frenar al ver que el chafirete invadió su carril.

A pesar de lo aparatoso del choque, tanto el chafirete como su pasajero no sufrieron lesiones de consideración, ya que solo bastaron una palmaditas sanadoras por parte de los ‘ponecuritas’ para dejarlos como nuevos de paquete, sin que requirieran traslado al hospital.

Los que no se salvaron de visitar los patios de ‘trancholandia’ fueron los dos autobuses y la ‘máquina’ de hacer billullo’, para el deslinde de responsabilidades.

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