Un hombre en estado de ebriedad de Felipe Carrillo Puerto casi llega al chapuzón del más allá, pues bajo los efectos de la sustancia, se decidió aventarse a la piscina y al mal caer, se aporreó que casi se ahoga.
El hecho ocurrió en la piscina ubicada en la Calle 66, entre las calles 54 y 93, en la Colonia Emiliano Zapata, la tarde del domingo, como a las 6:00 de la tarde, cuando tras un mal cálculo al echarse un clavado, el hombre terminó golpeándose el abdomen y quejándose de dolor mientras intentaba mantenerse a flote.
Testigos del divertido, pero preocupante suceso narraron cómo el hombre, cuál delfín en apuros, luchaba por salir del agua después de golpearse. Afortunadamente, algunos presentes lograron sacarlo de la piscina, evitando así que el chapuzón se convirtiera en una tragedia. Una vez fuera, fue llevado a un hospital para recibir atención médica, aunque el susto parecía ser lo más grave de todo.
Elementos de seguridad pública llegaron rápidamente al lugar, probablemente esperando algo más que un hombre empapado y adolorido. Al final, todo quedó en una anécdota más para contar, y el protagonista seguramente pensará dos veces antes de combinar bebidas y piscinas en el futuro.
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