Tras ser detenida en cumplimiento de una orden de aprehensión por el delito de abuso contra su nieta de 3 años, la señora Lilia “N”, de 53 años y originaria de Minatitlán, Veracruz, fue enviada al Hospital Psiquiátrico Yucatán para valorar su salud mental, pues al ser presentada ante la jueza de Control que la requirió, la mujer se comportó de manera errática e incoherente.
Ante la juzgadora, la inculpada se mostraba incoherente y presentaba una conducta que no reflejaba que estuviera bien de sus facultades mentales.
Ante esto, el defensor de oficio que la asistió solicitó en esos momentos que se someta a una valoración psiquiátrica para determinar su estado de salud mental y de esta forma buscar la manera que se le someta a proceso penal con la atenuante de ser persona inimputable.
De esta manera, de ser encontrada responsable del delito que se la acusa, la pena sería menor y estaría en el Cereso meridano en un área especial donde se encuentran las personas afectadas de sus facultades mentales y que cometieron una conducta tipificada como delito.
Agentes de la Policía Estatal de Investigación (PEI) de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en coordinación con la Fiscalía General del Estado, reunieron las pruebas que acreditan la probable responsabilidad de la mujer, de 53 años, en los delitos de abuso y corrupción de menores.
Las agresiones ocurrieron durante dos años aproximadamente en un predio de la colonia Melchor Ocampo, en la ciudad de Mérida.
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