Un verdadero caos se registró en calles de la colonia Salvador Alvarado Sur, en Mérida, pero no por algún congestionamiento vial sino por «cortesía» de un «gracioso».
Todo iba normal cuando a un domicilio en particular comenzaron a llegar casi de forma simultánea varios repartidores de comida.
Trataron de hacer sus entregas como de costumbre, pero la dueña del predio les dijo que ella no había pedido nada.
Entre los repartidores afectados estaba gente con hamburguesas, pizzas, tacos, pollos y otras meriendas que quedaron frías, y encima hay que agregar la supuesta contratación de un mariachi.
Tanto fue el desconcierto que al sitio se presentaron agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), y entonces algunos vecinos comenzaron a quejarse de una persona que suele hacer estas «bromas» de pésimo gusto y a quien ya tienen identificado.
Varias personas pidieron la intervención de la Policía Cibernética y de otras autoridades para tomar cartas en el asunto, ya que, según parece, la persona responsable de este merequetengue suele hacer perder el tiempo a los demás con falsas noticias de incendios, entre otros.
