Policías y fantasmas: El brujo y el calabozo de Sinanché

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Jorge Moreno/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- En anteriores ocasiones ya hemos presentado en esta sección los reportes que me han dado varios comandantes de Policía en relación con los fenómenos paranormales que ocurren en interior de los calabozos de diversos municipios tales como Chocholá, Tekal de Venegas, Sacalum, Timucuy, Seyé, etc.

Hoy les presento una entrevista con un policía del poblado de Sinanché, quien afirma que ocurre lo mismo en el calabozo de este municipio, el cual está en el interior del palacio, pero además, reporta otros casos que ocurren en la población.

“En el interior de una de las celdas pasan cosas raras, lo han visto no sólo los detenidos, sino también los policías; se ve la silueta de una persona como si se estuviera colgando de los barrotes, pero cuando nos acercamos ya no hay nadie ahí”, comenta.

“Esto se ha visto cuando sabemos que la celda está vacía, pero también cuando hay un detenido, éste de pronto empieza a gritar que ve a una persona ahorcada ahí; si sólo fuera un borracho quien lo dijera pues a lo mejor no lo creemos, pero a veces personas en sus cinco sentidos lo afirman y describen al ahorcado, tal y como lo han visto los policías y otras personas, así como empleados que han tenido esa experiencia”, señaló.

Pero otra teoría de las manifestaciones es que como hace varios años en el escenario que se ubica enfrente de las celdas se realizó una autopsia, piensan que a lo mejor el alma en pena del difunto el permanece ahí.

Más casos

Pero esto no es lo único que pasa en Sinanché, fue precisamente otro policía quien tiempo antes ya me había platicado sobre otros reportes paranormales:

Un veterano expolicía municipal fue quien afirmó que por las noches la gente decía que veían una sombra negra rondando por la iglesia, esto lo atribuían al mal aire y también a un poderoso brujo que al parecer era del municipio vecino de Telchac.

Este brujo ya había fallecido varios años atrás, pero su alma era la que rondaba en el poblado al parecer porque en vida se había enamorado de una joven de Sinanché que nunca le hizo caso y ya difunto, rondaba buscando a esta dama, la cual ya no estaba en este sitio, unos decían que se fue a vivir a Tizimin y otros que ya había fallecido.

Una familia de este pueblo, quizás conmovida por esta situación, mandó a llamar a un hechicero de magia blanca en Motul para que, a través de un ritual, le hiciera entender al alma en pena del brujo que su amor de Sinanché ya no estaba ahí.

Pero esto resultó contraproducente, ya que despuésr de que se hizo el hechizo, el brujo se molestó y no entendió esto y a partir de ese día, en toda la población se escuchaban los aullidos de los perros atemorizados como si los estuvieran correteando para pegarles, las ventanas de las casas se aporreaban, los botes de basura de los alrededores y el mercado eran aventados y también una especie de torbellino se veía por todo el pueblo principalmente por las noches.

Se dice que tuvieron que encargar una misa especial para que esto poco a poco se calme, lo que a final de cuentas se logró unas semanas después, pero no sin antes pegarle buenos sustos a muchas personas.

Hay quienes dicen que la misa fue efectiva y el alma en pena del brujo al fin cruzó el umbral, pero otros creen que simplemente se fue a otro poblado, ya que poco después se empezó a rumorar que en Yobaín también empezaron a ocurrir los mismos fenómenos poco tiempo después.

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