Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Macabra sorpresa se llevaron las personas que ayer por la mañana estaban en el área de urgencias del Hospital O’Horán, pues descubrieron que un señor que presuntamente descansaba sentado en la banqueta, en el acceso de esa zona, en realidad estaba bien muerto, por lo cual fue cubierto con una sábana para luego ser levantado por personal del Servicio Médico Forense que llegó hasta el sitio.
Sobre este caso, lo que pudo averiguarse fue que el hombre, de unos 55 años de edad, se sintió mal a eso de la una de la mañana en su domicilio del fraccionamiento Brisas del Norte, hasta donde fue por él una ambulancia de la SSP que lo llevó a la sala de urgencias del O’Horán.
No fue sino hasta las 5 de la mañana cuando un guardia de vigilancia que hacía su ronda descubrió al señor recostado en la banqueta de afuera, junto a un teléfono público.
Se acercó a llamarle, pero ¡ay, Nanita!, el pobre andaba bien frío, por lo que se alertó a las autoridades hospitalarias que tras verificar lo ocurrido, taparon con una sábana al pobre hombre que ya estaba en el otro mundo.
Se dejaron caer hasta allá uniformados de la SSP que posteriormente solicitaron la presencia de la banda del Semefo para cargar el cuerpo de este hombre, presuntamente registrado en su consulta madrugadora como Luis Rosado.
Al entrevistarse a los médicos sobre si este hombre había sido dado de alta o se peló del hospital, nadie puro informar nada porque lo atendieron los del turno anterior. El fallecido tenía diálisis.
