Por poco mata de un infarto a la pasajera del taxi, una mujer imprudente que se pasó el alto entre camellones con su Versa en plena avenida Itzaes.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Por querer ganarle el paso a un taxista, una mujer ocasionó que éste se le estampara y que la pasajera del mismo sufriera un ataque de pánico; además, por su imprudencia, tendrá que pagar por los daños que el carro sufrió, pues la defensa quedó rota de un lado al igual que los faros.
Lo que ocurrió fue que la conductora del Versa con placas YXU258A, manejaba sobre la avenida Itzaes de norte a sur, pero al llegar al cruce con la calle 49, dobló para cambiar de dirección, el único problema fue que no respetó el alto entre camellones.
Y es que quiso ganarle al taxi, que también iba sobre dicha avenida, sólo que en dirección contraria, es decir de sur a norte; desafortunadamente, la doña no calculó bien y terminó metiéndose en el camino del vehículo de alquiler, cuyo guiador no pudo detenerse del todo.
Así que el taxista volanteó con la intención de que el impacto no fuera tan fuerte, sin embargo terminó con la defensa dañada, aunque lo peor fue que la pasajera que iba con él (una señora de la tercera edad) sufrió de una crisis nerviosa, por lo que tuvo que ser atendida por paramédicos de la Secretaría de Seguridad Pública.
El taxista se portó buena onda y aceptó llegar a un acuerdo con la otro conductora, luego de un rato llegaron los representantes de las aseguradoras y todo quedó en un mal momento.
