Once tanques y una camioneta terminaron severamente dañados luego del incendio de la unidad de una empresa gasera.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Momentos de desesperación vivieron ayer habitantes de la colonia Canul Reyes, de Progreso, luego de que una camioneta repartidora de gas se incendiara en la esquina de las calles 98 por 37, registrándose la explosión de los tanques de gas que transportaba.
El siniestro ocurrió como a las 11 de la mañana, cuando el operador de la camioneta de venta de gas butano de la empresa «Tomza», Rogelio Buenfil, de aproximadamente 30 años de edad,descendió de su unidad para atender a un cliente, dejando su máquina encendida. Mientras bajaba el tanque solicitado y lo instalaba en el predio, de repente, la camioneta comenzó a sacar humo y posteriormente aparecieron las primeras llamas en el interior de la cabina.
Incluso de activó la alarma y debido a que se encontraba encendida, comenzó a avanzar sobre la calle 98 hasta detenerse después de golpear ligeramente la banqueta de la esquina de la calle 37, pero en el recorrido las llamas aumentaron de tamaño, por lo que al detenerse el fuego se extendió a la parte trasera del vehículo alcanzando los tanques de gas.
Por efecto del calor, los tanques comenzaron a explotar, provocando un ruido ensordecedor, que alertó a los vecinos de la zona, que se resguardaron de la situación saliendo de sus hogares. La señora María de los Angeles Canché, quien habita una de las casas de la esquina donde ocurrió el percance, por su desesperación únicamente atinó a meterse al baño, ante el temor de que los tanques explotaran, ya que la camioneta se encontraba justamente frente a sus domicilio.
Al sitio llegaron bomberos, Policía y paramédicos, que se coordinaron para poner a salvo a la población y buscar controlar la situación, que cada vez se tornaba más peligrosa.
Afortunadamente, luego de más de una hora se consiguió controlar el siniestro, así como las fugas de gas de los tanques que no explotaron. El vehículo y 11 tanques (3 de 30kg, 7 de 20kg y 1 estacionario de 120kg) presentaron daños, por lo que el sitio permaneció cerrado a la circulación durante dos horas, para evitar que se pudiera suscitar algún incidente posterior.
Los pobladores comentaron los momentos de temor e incertidumbre vividos en esta situación, en donde se habló del fallecimiento del chofer en un primer momento, hecho que posteriormente fue desmentido, ya que Rogelio Buenfil salió ileso al no estar dentro del vehículo al momento del incendio.
