Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Fuego, susto, gritos y mucho humo negro se dejaron ver y sentir ayer por la tarde en la calle 65 con 50 y 52 del Centro de Mérida, al incendiarse un camión de la Alianza de Camioneros de Yucatán de la ruta Vergel.
De pura chiripada no salieron lastimados ni los pasajeros ni el operador de la nave, ya que éste, apenas vio que salía humo del motor, ni tardo ni perezoso bajó a toda la banda y así el espanto quedó nomás con saldo de daños materiales.
El dato averiguado por De Peso refiere que ayer iba bien campante José Luis Arceo Romero manejando un autobús de la ruta mencionada y placas 800981Y sobre la calle 65, de oriente a poniente con rumbo a su paradero.
Al cruzar la calle 50 sintió un olor bien gacho y pensó que algún pasajero le estaba tronando la tripa, pero qué tripa ni qué nada, porque vio que de la parte frontal de la unidad empezaba a salir humo, así que de boleto se pegó hacia la derecha, bajó a toda la gente por la puerta de atrás, bajó él y empezó a salir fuego del motor de la nave, quedando ésta envuelta a los pocos segundos.
Las llamas crecieron rapidísimo y estaban tan altas que los cables de energía eléctrica que estaban arriba del vehículo empezaron a quemarse y a echar chispas y explosiones, de modo que llegó de urgencia personal de la CFE para cortar el suministro de energía. Asimismo, agentes de la Policía de Mérida cerraron el paso de vehículos y de gente por la zona para que los bomberos, que ya habían llegado, chambearan a sus anchas.
Por fin lograron apagar el incendio, pero el camión de Vergel ya estaba hecho fierro quemado y fibra y plástico derretidos, así que el operador avisó a sus jefazos para ver qué onda con la aseguradora. Por suerte nadie salió lastimado.
