Te regalan casa embrujada en Orizaba, sólo debes pasar la noche ahí

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Mayordomo envenenó a familia en Veracruz para quedarse con sus riquezas.

Agencia/ Jorge Moreno
VERACRUZ.- En la ciudad de Orizaba, Veracruz, existe una particular leyenda sobre una casa a la que todos los pobladores le temen, pues aseguran que está maldita debido a unos asesinatos que ocurrieron dentro. La casa, por supuesto, está abandonada y aseguran que se regala a quien logre pasar una noche dentro.

Según cuenta la leyenda, hace algunos años una familia con alto poder económico compró la hermosa mansión para vivir en ella; sin embargo, su riqueza provocó la envidia de un hombre que logró colarse como mayordomo de la familia.

Luego de estudiar sus hábitos durante mucho tiempo, el mayordomo armó un plan con el que mataría a toda la familia para quedarse con el dinero de las cajas fuertes y las joyas, por lo cual un día los envenenó y conforme fueron muriendo colocó los cadáveres en el sótano de la casa.

Sin embargo, cuentan los pobladores que un amigo de la familia que llegaba de visita fue testigo de cómo el mayordomo ocultaba los cuerpos, y ante el coraje se le fue a golpes hasta que logró encerrarlo en el mismo sótano con los cadáveres, provocándole la muerte por asfixia.

Pocos lo han intentado

Desde ese momento, la casa se encuentra en total abandono, pues aunque muchos valientes han intentado pasar la noche allí, nadie lo ha logrado, y aseguran que en algún momento de la noche pierden el conocimiento y cuando despiertan se encuentran en la calle sin recordar nada de lo ocurrido.

Esta casa abandonada se encuentra en lo que ahora es Sur 2 esquina con Poniente 5, frente donde se encontraba la tienda “Contino”, y ahora apenas y se ven las ruinas, ya que se construyó un muro alto para que los curiosos no entren.

Las pedradas y la basura que regresan donde estaban

También se cuenta que la fama de embrujado de ese sitio inició en los años noventas, cuando un día estaban jugando unos niños, y uno de ellos lanzó una piedra hacia el interior de la casa, y un momento después, el proyectil regresó con la misma fuerza hacia el exterior en la calle, justo en el momento que pasaba un automóvil por ahí, causando un tremendo disgusto al conductor debido a que esta piedra rompió el parabrisas; obvio que el guiador frenó y bajó rápidamente para buscar al culpable.

Entre el alboroto, algunos testigos junto con los niños, habían dicho que efectivamente, la piedra había sido aventada hacia la casa, pero que había regresado misteriosamente; a lo que el dueño del automóvil, no dudo en ir a reclamar.

Después de dar varios golpes fuertes al portón sin recibir respuesta alguna, no tardaron en decirle que en esa casa no vivía nadie y que no se le conocía dueño; indignado por tal ridículo en plena vía pública, no tuvo más remedio que retirarse del lugar.

Hubo un tiempo en que el camión de la basura tardó en pasar por esas calles, y los vecinos de esa casa tenían, entre otras cosas, varios desechos como láminas de cartón viejas, cajas; basura no tan escandalosa y propia como para ser tirada por allí sin que nadie se diera cuenta, por lo que no dudaron en arrojarla al patio de la casa, desde su propia azotea, y ya de noche, para que ninguna persona de la zona se diera cuenta de lo planeado, arrojaron la basura.

Pero cuál fue la sorpresa de los vecinos, que al amanecer, les reclamaron que había basura afuera y que daba mal aspecto a la calle y, efectivamente, la basura se encontraba afuera de la casa como si desde dentro alguien la hubieran sacado.

Extrañadísimos por lo ocurrido, no tardaron en confesar, que habían arrojado la citada al patio de la casa por la azotea, pero que no creían lo que estaban viendo, el aire no pudo haber levantado las láminas o cajas, pues no se habían escuchado ruidos en la noche; además, para sacarla tendrían que haber abierto el portón, lo cual nunca hicieron.

Hubo personas que entraron, y una vez en el interior de la casa, comenzaban a sentir extraños mareos, síntomas de mala presión, ganas de desmayarse, algunos se les nublaba la vista, otros veían todo a su alrededor retorcerse y de repente, la sorpresa de su vida, cuando por arte de magia, aparecían afuera de la casa, como si no hubieran entrado nunca.

Por eso hace unos 15 años se empezó a correr el rumor de que la persona que pasara una noche en esa casa se la regalaría el ayuntamiento y hasta el momento, esto no ha ocurrido; en primera instancia porque nadie ha logrado quedarse en el interior de la misma por más de seis horas.

 

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