Agencias/De Peso CIUDAD DE MÉXICO, Méx.-  Antes de la ‘popularidad’ de los narcos de tener como mujer a una ‘chamacona’ ex reina de belleza, existió una pareja que marcó la tendencia a estas relaciones en la década de los 80’s, se trata de Ernesto Carrillo Fonseca ‘Don Neto y la ganadora de Nuestra Belleza Sinaloa 1967, Ana Victoria Santanares. La originaria de Los Mochis conquistó a uno de los llamados padres del narcotráfico y de los fundadores del Cártel de Guadalajara, grupo criminal que dominó en los ochentas el tráfico de drogas por su alianza con los cárteles colombianos. En el libro ‘De carnaval, reinas y narco’, de Arturo Santamaría Gómez, se narra que la entonces mujer de 18 años de edad era vista conduciendo lujosos automóviles en su ciudad natal. Se asegura que Santanares se casó con ‘Don Neto’ al cumplir la mayoría de edad, pero su matrimonio sólo duró cuatro años debido a que la ex miss no quiso exponer a sus dos hijos a los riesgos de la delincuencia organizada. Tras terminar su relación sentimental con el capo acusado de la muerte de Enrique ‘Kiki’ Camarena, conoció al empresario colombiano Enrique Turbay. Aparentemente la mujer vive desde 1984 en Cartagena y además de los hijos que tuvo con Fonseca, tiene otra hija de 19 años producto de su relación con el empresario. Con información de Unión Jalisco