Irelis Leal / De Peso
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- La falta de iluminación a la altura del kilómetro 319 de la carretera federal 307, tramo Puerto Morelos-Playa del Carmen, casi manda a una familia hacia el camellón que divide los carriles de la vía, ayer a las 4:45 de la madrugada, cuando el conductor de un Dodge Stratus color humo, placas DHG-66-33 de Chiapas, circulaba en dirección al sur, acompañado de su ‘domadora’ y su retoño.
De acuerdo con el suertudo conductor, circulaba a mediana velocidad, pero al pasar un retorno no logró ver la desviación y se montó en la guarnición del camellón, y antes de seguir su trayectoria fuera del camino alcanzó a hacer una maniobra evasiva, pero tres de sus cuatro llantas reventaron.
Debido al ‘changadazo’, el conductor y sus acompañantes se acomodaron unos buenos cates, que dejaron con dolores de lomo y cadera a su mujer e hija, además que él comenzó a sentirse mal.
Automovilistas que pasaban pidieron auxilio al llegar al filtro de seguridad para el envío de una ‘chillona’, cuyos tripulantes intentaron valorar a los lesionados, pero estos decidieron darles las gracias y esperar a que una grúa fuera por ellos, pues ni con la llanta de refacción la harían.
