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MÉRIDA.- Por haber asesinado a su esposa en el predio que compartían en un fraccionamiento de Kanasín, en agosto de 2018, José ‘N’ finalmente fue sentenciado, y recibió 40 años de prisión, además de que deberá pagar multas, la reparación del daño, y perdió sus derechos políticos y de familia.
El terrible caso se dio el 22 de agosto de ese año en una vivienda del fraccionamiento Pedregales II CTM de Kanasín, y la víctima fue M.P.P., a quien ese tipo mató de asfixia por sofocamiento.
Respecto al caso, la Fiscalía General del Estado (FGE) presentó las pruebas científicas, periciales, documentales y testimoniales que permitieron a los integrantes del Tribunal Segundo de Juicio Oral emitir el fallo condenatorio que derivó en la pena privativa de la libertad por 40 años, y que además otorgó 750 días de multa, la reparación del daño por más de un millón 600 mil pesos, y pagar el apoyo psicológico a los padres e hijos de la víctima.
Los integrantes del Tribunal de Enjuiciamiento establecieron que además de la pena decretada con base en la Ley vigente en el año en que ocurrieron los hechos, debe pagar la alimentación de los hijos menores de edad y participar en programas de reeducación en contra de la violencia hacia las mujeres, se le negaron los beneficios de sustitución de sanciones y perdió sus derechos políticos y de familia, así como también recibió una amonestación pública.
Fue la tarde de aquel 22 de agosto cuando José ‘N’ asesinó a su mujer, por razones de género, según se estableció durante el desarrollo del proceso por ser su pareja sentimental, y tras lo ocurrido intentó escapar, pero poco después fue arrestado, encarcelado, y dio inicio el juicio en su contra que finalmente concluyó con la sentencia que lo tendrá preso por 40 años.
Auténtico infierno
En una de las audiencias realizadas en el Centro de Justicia Oral de Kanasín, en 2018, se dio a conocer que el acusado ejercía violencia de género a su pareja, pues de acuerdo con la acusación de las fiscales, la joven era tratada como esclava sexual y vivía encerrada en la vivienda, solo José tenía las llaves del inmueble.
Los fiscales basan su acusación en las declaraciones de tres vecinos, quienes señalan que este sujeto llegaba en una motocicleta todos los días, alrededor de las tres de la tarde, abría la puerta para entrar y cuando se retiraba entre las seis y siete de la noche, le ponía seguro dejando encerrada a su pareja y a sus dos hijos menores.
Los fiscales señalaron que los dos niños pasaron un día completo con su madre muerta, ya que la autopsia realizada por el Servicio Médico Forense determinó que la joven falleció 24 horas antes de que fuera hallado el cadáver.
