Redacción/De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Un vato caminaba por calles del fraccionamiento Prado Norte cuando sintió dos plomazos que lo obligaron a cerrar los ojos, al abrirlos de nuevo ya se encontraba con San Pedro, fue así que se consumó esta ejecución en la supermanzana 260.
El perturbador sonido de las balas resonó a las 11:00 de la mañana en la manzana 3 de dicho asentamiento habitacional, donde de acuerdo con los primeros informes policiales, el fulano, el cual hasta el cierre de esta edición se encontraba como desconocido, caminaba sobre la avenida Chetumal, cerca del Colegio de Bachilleres, cuando de pronto dos sujetos que se transportaban en una motocicleta se le emparejaron, uno de los cuales sacó una trona y le disparó por la espalda en al menos dos ocasiones.
Una vez que los sicarios vieron caer al chavo huyeron a toda prisa del sitio, la víctima quedó tendida sobre la banqueta temblando como pez fuera del agua, pues se resistía a ser abrazada por la Catrina; vecinos que presenciaron el violento hecho dieron parte a las autoridades por medio del número de emergencias 911, por lo que al lugar llegó una nutrida manada de ‘cuicos’ municipales.
Al poco tiempo arribó una jovencita, quien dijo ser familiar del herido, la cual comenzó a llorar desconsoladamente a su lado, siendo retirada por los oficiales para no contaminar la escena del crimen, poco después llegó una ambulancia de la Cruz Roja, cuyos paramédicos confirmaron el deceso del hombre, quien vestía pantalón de mezclilla azul y playera blanca tipo sport, por tal motivo los ‘matutes’ acordonaron la zona en espera de agentes de la Vice Fiscalía de la Zona Norte.
Los ‘ministeriosos’ al llegar se encargaron de las primeras investigaciones, en lo que personal de Servicios Periciales levantaba indicios, tomaba el ‘pack’ de fotos y realizaba el levantamiento del cadáver y su traslado a la morgue, donde se le haría la necropsia de ley.
