Redacción/De Peso
CHETUMAL, Q. Roo.- Ayer en la mañana dos motonetos fueron chupados por el diablo porque fueron embestidos por un vato al volante quien se voló el disco de alto según el chisme que contaron los vecinos en la supermanzana 249.
El ‘ranazo’ ocurrió en el cruce de la avenida Paseo de Crisantemos con calle Geranios y las lenguas viperinas juraron por el ‘osito panadero’ que fue Pablo Garduza, de 26 años, quien a bordo de su Nissan Np300 blanca, engomado SZ-0739-G, se estaba contando los pelos de la mano y por eso nunca vio el disco de alto en dicho cruce.
Este conductor cuando frenó se dio ‘color’ de que ya la había regado y cuando miró por sus espejos entendió que su mañana sería larga, pues le propinó tremendo aventón a la moto Italika roja, laminita C78RJ, de David Antonio Vázquez, de 26 años, quien viajaba con un cuate llamado Jorge Luis Gómez Cacho, de 24.
Este par de jinetes no vio lo duro si no lo tupido cuando estaban como costal de papas en el suelo; pero hasta eso les fue bien porque en su auxilio llegaron los Ángeles Verdes quienes de volada les dieron su merecida manita de gato.
TE PUEDE INTERESAR: Guamazo ‘Enclave’: ¡la regaste!
Como ambos ‘charritos’ se quejaban de dolor en su esqueleto fueron atendidos y trepados a la ‘chillona’ en dirección al Hospital de Especialidades de la 510, donde quedaron en manos de los galenos. Los ‘tranchos’ se hicieron cargo del accidente, para el deslinde de responsabilidades.