Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- José Cruz Can Chiquil, de 43 años, ruletero del terror al parecer llevaba prisa pues el topo ya asomaba la cabeza, así que le pisó el acelerador hasta el fondo a su ‘pesera’ y por no esperar su turno en el cruce de las avenidas Los Tules con Chacmool, supermanzana 252, acabó volcando aparatosamente, ayer a las 8:00 de la mañana.
El estreñido ‘chofi’ de la ‘pesera’ TTE-223, Nissan Urvan, matrícula 54-24-TRX, de la Ruta 81 Paseos del Mar-Plaza Las Américas iba como rayo sobre la avenida Chacmool, pero al incorporarse hacia la calle Págalo no se dio tinta que en el carril de bajada de la avenida circulaba el Nissan Tsuru rojo, engomado WSU-92-15 de Tabasco, al mando de Francisco Javier Hernández Jiménez, de 29 años, contra quien chocó.
Chismosos dijeron que el colectivo fue impactado de uno de sus costados, lo que provocó que Pepillo perdiera el control del volante y volcara sobre la cinta asfáltica. Aparte del ruletero, dos pasajeros que recién subieron, sintieron que su hora había llegado cuando dejaron de ver las cosas de forma vertical y las empezar a ver en horizontal.
Una ‘chillona’ particular arribó de volada para aplicarles a los viajeros el apapacho que alivia para luego enviarlos al Hospital General y descartar cualquier lesión interna.
El pobre ‘Chiquilazo‘ solo se llevó unos cuantos guamazos al momento de la colisión, pero se aguantó como los meros machos y se quedó a resolver junto con los ‘tranchos’ el proceso administrativo; las naves fueron a parar al corralón hasta el deslinde de responsabilidades.
