Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- En dos casos distintos, dos ‘gringos’ empistolados quisieron pasar inadvertidos en los filtros del Aeropuerto Internacional de Cancún, pero se la pellizcaron pues fueron detectados y quedaron atorados, listos para pasar a la sombra.
Según el chisme, el primer caso ocurrió en la terminal 3, cuando un equipaje de color negro se veía bastante ‘sospechudo’; en eso, agentes federales y de Migración procedieron a inspeccionarlo.
La tipa, al ver cómo los uniformados miraban su equipaje, empezó a sudar frío y casi se le caen los chones del susto cuando al abrir su maleta ¡surprais! en el interior vieron que llevaba nada más y nada menos que una calibre .38 Ruger con su cargador, además de seis cartuchos útiles.
Según las autoridades, la fémina -procedente de Detroit, Michigan- pretendía pasar el arma así como si nada, pero ‘nel pastel’, no lo consiguió.
Como no pudo acreditar la procedencia del pistolón y mucho menos la documentación correspondiente, no le terminó más remedio que escuchar la letanía a las personas en detención y quedó a disposición del agente ministerial federal.
El segundo hecho se dio al realizar revisiones aleatorias en el área de reclamo de equipaje internacional de la terminal 4, donde se tuvo contacto con un hombre procedente de San Louis, Missouri, quien dentro de su maleta transportaba una caja con 50 cartuchos útiles calibre 9 milímetros, por lo que le cayó la voladora.
