Luis Hernández / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Hasta pajaritos vio un chavo que rolaba en su carro sobre el Bulevar Kukulcán, pues al perder el control por exceso de velocidad se embarró en un poste en el camellón central.
Muy fresco como primavera un chavo le hundía la chancla al fondo del acelerador a su Mazda 3 rojo, gomas UUV-73-28, mientras rolaba por la Zona Hotelera rumbo al centro de la ciudad, pero en una mala jugada de la vida se salió de la vida de rodamiento.
El vato, quien prefirió no brillar en sociedad, terminó embarrando la trompa de su nave en un poste metálico de alumbrado público, que demostró estar bien puesto pues ni cosquillas le hizo, mientras el carro hasta dio un giro.
Al kilómetro 24, cerca de Punta Nizuc, llegaron ‘tamarindos’ y ‘politurísticos’, pero allá es terreno de los ‘federicos’, quienes se hicieron cargo de todo y mandaron el carro al corralón. Su conductor dijo estar bien y se fue derechito al ‘hongo’ federal.
