Agencias
El director del Centro de Reinserción Social de Chetumal, Ángel Domínguez Arias, y 12 custodios, están en la mira de la Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo y autoridades federales por presuntos actos de tortura encontradas en el penal durante una revisión sorpresa.
“La primera Visitaduría General es la que está realizando las investigaciones preliminares para proceder a la queja de oficio, sobre las condiciones en las que se encontraron algunos internos”, dijo el ombusdman quintanarroense Marco Antonio Toh Euan.
Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública confirmaron que también habrá una investigación por parte de autoridades federales, tras la inspección realizada por agentes del Sistema Penitenciario Federal y del Sistema Nacional de Seguridad Pública, como parte de una evaluación a las diferentes cárceles del país.
En el caso del Cereso de Chetumal, se encontraron en varias de las celdas a reos con posesión de drogas, teléfonos celulares y hasta un aire acondicionado en el lugar donde se encuentra un recluso “VIP”, identificado como D.S.G., y que purga una condena por delincuencia organizada.
“En el caso del aire acondicionado, se evidencia que la dirección del Penal tenía conocimiento sobre estos hechos, ya que es prácticamente imposible que no estuvieran enterados de este aparato electrónico”, señaló la fuente.
Durante la revisión ocho reos aseguraron ser torturados de manera frecuente por los custodios, presentando como prueba laceraciones en varias partes de su cuerpo.
Este caso, es la segunda investigación por presuntas violaciones a los derechos humanos en el Cereso de Chetumal, en lo que va del año: apenas en enero pasado hubo acusaciones en el sentido de que mujeres que purgan condena en el área femenil, eran “traficadas” hacia el área masculina. Las propias internas fueron las que revelaron esa información.
Hasta el momento no se han presentado los resultados de esta investigación por parte de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo. En esa ocasión, el director del penal, Domínguez Arias, se limitó a negar las acusaciones.
