Agencia / De Peso Una mujer sobrevivió al ataque de un oso golpeándolo en varias ocasiones y arrastrándose a los arbustos mientras su chihuahueño distraía al animal. Melinda LeBarron sufrió fracturas, cortaduras, moretones y varias mordeduras durante el ataque a las afueras de su casa en una zona rural de Pensilvania el miércoles por la noche, dijo su hijo. La mujer permanece hospitalizada en condición, informó Sin Embargo. “Ella es muy, muy afortunada por estar viva”, dijo su hijo, Trent LeBarron, que describió a su madre como una persona valiente. “Ella estaba golpeando al oso con los puños y todo eso. Tiene la mano derecha completamente inflamada por golpear al oso”. El oso negro arrastró a Melinda unos 70 metros por el patio, a través de un camino y hacia los matorrales, donde el perro trató de intervenir mordiendo al oso varias veces. El ataque dejó un rastro de sangre que los familiares de LeBarron siguieron. Eventualmente, Melinda LeBarron quedó inmóvil y el oso dirigió su atención al perro, lo que le permitió a ella meterse en los arbustos. Ella entonces lanzó un palo para distraer al oso y finalmente se fue a casa para pedir ayuda. El perro se las arregló para regresar a la casa y fue hallado bajo la cama, gimiendo. “Ella está estable ahora”, dijo el hijo. “Está mejorando. Le falta mucho y muchas operaciones”.