Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Reventado entre piedras y maleza quedó un vehículo repartidor de botanas Barcel que se salió del camino en la carretera Mérida-Valladolid, el parecer luego de que su guiador echó un pestañazo peligroso que lo dejó madrificado y a la camioneta bien perjudicada.
El accidente ocurrió al mediodía cuando un jovenazo guiaba esta nave cargada con sabrosas botanas saladas y picositas, pero a la altura del kilómetro 22 perdió el control, pues aparentemente se echó un sueñito de segundos.
Esto provocó que el conductor pierda el control del volante y ¡órale!, se fue hacia la derecha hasta que se le acabó la cinta asfáltica y se clavó en la maleza y las piedras.
Solo unas rocas detuvieron la loca carrera del conductor, quien estuvo a un pelo de rana calva de volcarse.
Afortunadamente el chavo solo sufrió un gran sacudón y no le quedó más que llamar a sus supervisores y a su aseguradora.