Ángel Euán / De Peso
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Un pestañazo casi le cuesta la vida a solitario conductor de una van de transporte turístico, porque cuando circulaba como alma que lleva el diablo, la parte trasera de una revolvedora de cemento paró su loca carrera dejando al responsable atrapado entre los fierros retorcidos; buenos samaritanos al igual que elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos lo auxiliaron.
Justo cuando las manecillas del reloj marcaban las 2:26 de la tarde de ayer, y en medio de un congestionamiento vehicular sobre la carretera federal, tramo Playa del Carmen-Puerto Morelos, varios automovilistas saturaron las líneas del 911 para solicitar en clave ‘¿ya llegaste?’ una ‘chillona’, así como la presencia de los ‘federicos’.
Más rápidos que una tortuga coja y con un poquitín de suerte arribaron socorristas a bordo de la ambulancia de Rescate y Urgencias Médicas (RyUM), quienes de volada sacaron sus implementos y procedieron a brindarle los primeros auxilios a Héctor ‘N’, quien presentaba golpes contusos, por lo que fue empaquetado y enviado de emergencia al Hospital General pa’ que recibiera atención médica.
Según las malas lenguas, circulaba de sur a norte la unidad Toyota Hiace blanca, láminas federales 775-RN-8, la cual era conducida a exceso de velocidad; el chofer, al parecer, se quedó dormido al volante y despertó cuando se estampó en la parte trasera del camión Kenworth Kenmex blanco, tipo revolvedora y placas XV-43-865.
Los daños materiales fueron valuados en poco más de 200 mil pesos, ya que la camioneta quedó lista para ser vendida como fierro viejo; al sitio acudió la Policía Federal División Caminos, que puso a disposición de las autoridades ministeriales ambas unidades.
