Redacción/De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Con una dolorosa fractura de pierna resultó un charrito motorizado y todo por la culpa de un desenfrenado taxista que le valió tres costales de estiércol la preferencia vial del motociclista provocando el tremendo choque donde obviamente el jinete de la burrita de acero salió bien amolado.
Ayer a las 4:30 de la tarde, cuando las chicas del 911 dejaron el chisme para después y se pusieron a chambear pues varias llamadas reportaban una persona lesionada sobre la avenida Niños Héroes, a la altura de la supermanzana 229.
En ‘fa’ fue enviada a lugar una ‘chillona’ de Jet Medical, una ‘trulla’ repleta de ‘tranchos’ para que averiguaran qué ‘pedros’, quienes encontraron a un menor con la pierna derecha tipo acordeón, pues tenía los huesos fracturados, motivo por el cual de inmediato fue atendido por los socorristas para después ser trasladado al Hospital General.
Mientras que los ‘tamarindos’ se encargaron de la motoneta raza Italika azul, laminita JKF9M, que manejaba el lesionado y remolcaron el taxi Nissan Tsuru, número 7012, placas 10-57-TRY, mientras que su conductor fue asegurado para el deslinde correspondiente.
Paisanos que se encontraban en el lugar, vomitaron que el motociclista iba circulando de lo más normal cuando el gandalla ruletero intentó ganarle el paso y ¡zas! se impactó el morro en la parte trasera del taxi, quedando tirado a mitad de la avenida con sus huesos rotos.
