Orville Peralta / De Peso
CANCÚN, Q. Roo.- Show cómico, musical, con pleito incluido se registró ayer a las 2:30 de la tarde, ya que en un jacal de la supermanzana 248, en Paseo El Limonero en Villas del Mar III, unas damitas se dieron hasta por debajo de la lengua y olvidaron que eras ‘amiguis’, todo por un celular.
Los chismosos de la cuadra dijeron que las chamaconas junto con pegado con unos vatos estaban rajando trago desde muy temprano; las risas, el ‘despapaye’ y los tragos pasaron a segundo término cuando una de estas, harta de tanto chupe decidió retirarse a su cantón, pero se dio color que no solo le faltaba equilibrio y dignidad, si no también su celular.
Por más que aplicaba la de ‘lo busco, lo busco y no lo busco’ se alteró tanto que empezó a mentar ‘malles’ a todas sus ‘cuatemochas’, pero como nadie le decía qué onda, armó tremenda gresca y hasta la ‘poli’ llegó; cuando los agentes arribaron, esta dijo que le habían robado su celular y por lo tanto quería encontrar a los culpables.
Los agentes al ver que se trataba de un rollo ‘festivo’ solo le dijeron que podía hacer su denuncia correspondiente, y antes de retirarse les advirtieron que no eran horas para armar las ‘parys’, pues tenían el volumen de su música más que alto.
Fue así que la ‘cuicada’ se retiró, pero más tardaron en llegar a la esquina que en regresar porque las fulanas continuaron haciéndola de frijol digerido y la lluvia de catorrazos se armó en grande.
Una de estas hasta el suelo fue a parar y a otra, según dijeron, le rompieron la ‘mandarina’ en bastantes gajos, por lo que paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar a atender a las que acabaron dadas al catre.
Como la gresca se puso ‘pior’, los uniformados regresaron para bajarle los ánimos a las protagonistas, todo por un ‘trinche’ celular que escondieron. Las fulanitas fueron remitidas al ‘Torito Inn’ para dejarles en claro que no se puede escandalizar en vía pública.
Los vecinos, nada comunicativos, vomitaron que ya no soportan a las tres chamaconas, pues al parecer tienen el criterio bastante amplio y ‘diarina y huevo’ hacen sus escandalosas ‘chupifiestas’ con diferentes ‘machines’.
