La Chiquis/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- DICEN que el que se ha puesto las pilas y anda planchando escarpa en varios municipios es el morenazo sexy Raúl Paz, pues al parecer se ha tomado muy en serio eso de que como presidente estatal del PAN es su responsabilidad que las estructuras estén fuertes y listas para las elecciones del 2018. Bien por «Pacito» que, aunque tardó, parece que ya agarró la onda y entendió que tienen que jalar parejo si quieren seguir en la jugada.
DICEN que aunque no ha hecho mucho ruido en los medios de comunicación ni en redes sociales, la que podría dar un buen susto a los suspirantes de siempre en el puerto de Progreso es Lila Frías, pues resulta que la chava se ha dedicado a trabajar en dicho municipio y la gente le responde. Al parecer, los vecinos de ese puerto ya están cansados de que les den atole con el dedo y de las clásicas candidatas que sólo van a contar chistes colorados en lugar de comprometerse y ayudarlos a mejorar su calidad de vida. Todo parece indicar que Lila es como una brisa fresca para muchos de los progreseños.
DICEN que quien anda tirando su veneno por todos lados es nada más y nada menos que la priísta Carolina Herrera, quien no sólo habla mal de sus compañeras a quienes considera una amenaza en sus aspiraciones políticas, también se dedica a amarrar navajas para que se agarren unas con otras y se arme tremendo lío. Es más, comentan que hasta de su presidente (Carlos Sobrino) habla y no muy bien que digamos. Pero, además se atreve, sin pruebas en mano, a difamar a reporteros asegurando que reciben dinero para alabar a algunos funcionarios y despedazar a otros. Eso no se hace señorita, es entendible que es nueva en el negocio de la grilla pero así no va a llegar muy lejos.
DICEN que los trabajadores del sector Salud ya andan urgidos para que llegue el día de mañana, pues será cuando elijan al próximo líder sindical. La pugna estará muy reñida pues por un lado está el ya muy conocido (y no por sus buenas obras sino por sus arrebatos violentos) Alvar Rubio y por el otro el actual dirigente, Eulogio Piña. Ambos aseguran que obtendrán el triunfo, aunque los trabajadores afirman que de regresar Alvar, las cosas comenzarán a salirse de control y solo beneficiará a sus amigos, como ya ha sucedido. Ojalá que piensen muy bien su voto, no se vayan a arrepentir.
